LEYENDA
Conoce nuestra historia
Cap 1. El trágico final de un nuevo comienzo
Cuenta la leyenda, que, en un mundo distinto, en unas tierras alejadas de la civilización y humanidad llenas de profundos bosques y largos ríos, vivía en paz y harmonía una gran población de búhos.
Estas criaturas eran especiales entre las demás aves de su misma especie, pues por sus venas corría sangre plateada.
Además, tenían capacidades intelectuales superiores, pues podían comunicarse mentalmente unos con otros. Solo conocían la felicidad y la gloria, hasta que un día, en el centro del bosque en el que vivían todos, apareció una grieta morada.
Los búhos alzaron el vuelo y se dirigieron a los árboles cercanos más altos, expectantes y aterrado de lo que pudiera suceder a continuación.
Sombras, sombras acechantes. Eran criaturas vengativas llenas de odio, que ansiaban absorber la luz interior de todo ser vivo.
"¿Ha llegado nuestra hora...?"
Desde el momento en que salieron de la grieta, estos empezaron a acechar y absorber sin descanso la luz de cada búho, hasta llegar a matarlos.
"¿Es este nuestro final...? No, no podemos terminar así."
Pero una búho, que estaba escondida en la copa del árbol mas alto del valle, fue vencida por la curiosidad que le provocaba la grieta.
"¿Y si estos seres provienen de otro lugar? ¿Y si hay más mundos a parte del nuestro? Seguro que no somos sus primeras víctimas."
Sin pensarlo, la búho se dejó caer en picado, esquivando todas las sombras de su alrededor, hasta finalmente meterse en la grieta.
"Todo es morado... Solo hay silencio... Pero espera, eso de allí... ¿Es luz?"
La Búho intentó llegar a aquella luz, pero, al llegar, se encontró con la dureza de una roca la cual no podía cruzar.
"¿Estoy atrapada? ¿Qué me ha pasado?"
Todo parecía negativo; la búho ya no podía escuchar ni a sus hermanos búhos, ni los escalofriantes gritos de las sombras, tan solo una suave brisa rozando su oreja.
"¿Será cierto que estoy en otro mundo?"
Cap 2. El resurgir de la luz
Pasaron días incluso semanas y la búho aún estaba atrapada en esa especie de roca.
Hasta que, en una mañana cálida, una chica de pelo blanco paseaba por un valle junto con su corcel cerca donde la búho estaba atrapada.
La chica no pudo evitar ver aquella extraña roca, cuyo exterior parecía tener forma de ave. Ella, con curiosidad, decidió bajar del corcel y acercarse a ver la roca desde un mejor ángulo.
Nunca antes había visto algo así, por lo que decidió llevársela. Pero, con tan solo rozar la roca con las yemas de sus dedos, un fuerte escalofrío recorrió su cuerpo.
Sus manos empezaron a temblar a gran escala, ¿qué le estaba pasando? Confundida y asustada empieza a gritar sin parar al ver el movimiento de sus manos.
De repente, de lo que parecía ser una roca, resurgió de esta en forma de luz, un búho gris
"¡Por fin puedo ver la realidad!" Gritó la búho, analizando el mundo que le rodeaba.
"¿Espera, puedes hablar?" Le inquirió la joven, confusa.
"¿Qué clase de ser eres tú? Nunca antes había visto una especie tan rara como la tuya"
Ambas criaturas empezaron a conversar, el ave le explicó el destino que había sufrido su mundo, y el riesgo que ahora corría en el de la humana.
"¿Búhos con sangre plateada? ¿Otros mundos? ¿Sombras?" A pesar de estar confundida, la chica logró entenderlo, pues las vidas y sangres de ambas criaturas se habían mezclado al rozarse cuando la Búho estaba atrapada en la roca. Era por eso que podía entenderla.
Ahora la búho compartía sangre humana y la muchacha, sangre plateada.
"¿Entonces, esas sombras pueden llegar también a mi mundo?" Dijo la muchacha, preocupada, mirando de reojo todo Silverglade.
"No si podemos evitarlo." Dijo la búho.
Cap 3. Un nombre para lo nunca nombrado
La chica dejó que la búho se posase en su antebrazo, y la llevó a lomos de su corcel, pues había pasado tanto tiempo en aquella roca que no tenía fuerzas suficientes para alzar el vuelo.
Así, ambas se encaminaron hacia el hogar de la humana, para que la búho pudiera descansar y reponer fuerzas.
"¿Y...? ¿Como te llamas? ¿O debería llamarte Búho?"
Dice la muchacha mientras dirigía a su corcel por el camino de vuelta.
"¿Nombre?" Respondió la búho, expresando confusión.
"Allí de donde vengo, todos y todas éramos hermanos y hermanas. Así nos llamábamos entre nosotros. Nunca tuvimos nombres propios, tan solo los superiores podían llegar a tener uno."
"Bueno, ahora tú eres tú propia superior." La búho, sorprendida, ladeó la cabeza, para mirar fijamente a la muchacha.
"Entonces, tú debes tener un nombre, ¿cierto?"
La chica soltó una pequeña carcajada antes de responder. "Así es, mi nombre es Paula. Pero puedes llamarme Pau, si así lo prefieres." Se presentó la humana.
"Oh. ¿Y cual podría quedarme bien a mí?" Inquirió la ave.
"A mi abuela siempre le fascinó la fauna del valle, especialmente las aves. Adoraba los halcones, las lechuzas, los búhos..."
"¿Y como se llamaba?" Preguntó la búho
Paula, al ver la emoción y curiosidad de la búho, le respondió con una pequeña sonrisa.
"Insmonia, era su apodo entre los conocidos del pueblo. Puesto que siempre paseaba por el pueblo cuando era de noche" A la búho le gustó el nombre, pero más el hecho de poder identificarse consigo misma.
"Bien pues, a partir de ahora, yo, Paula, te nombro a ti Insomnia, la búho plateada." Determinó Paula.
"La ultima en mi especie." Murmuró Insomnia.
"¿O no...?"
Cap 4. El sentido de la importancia
Finalmente, Paula y Insmonia llegaron al pueblo natal de la humana. Moorland, la tierra de los aventureros.
"Por fin estamos aquí; antes que nada, permíteme dejar a Presidente en su establo." La búho observó al gran corcel blanco.
"¿Así que los seres inferiores de este mundo también tienen nombres?"
Paula miró de reojo a la búho. "Todos merecemos un nombre, además, este caballo es de gran importancia para mí. Todo ser importante en la vida de alguien necesita tener un nombre, para hacerle único y especial entre los demás de su especie."
La búho ladeó sorprendida la cabeza, en su mundo solo los superiores tenían nombres, ningún otro búho o ser de su entorno podía obtener uno.
"Así que esto es sentirse importante..."
Tras dejar al caballo en los establos, Paula se dirigió, junto con Insomnia a su piso, que estaba situado cerca del centro del pueblo.
"Bien, esta es mi humilde morada, siéntete cómoda, necesitas recuperar fuerzas."
Insmonia se acomodó en un pequeño cojín, a los pies de la cama de Paula.
"Gracias por la hospitalidad." Dijo amablemente con una mirada tranquila
Pero de repente, algo sorprendió a la búho. Sentía una corriente fría entre sus plumas, a la vez que oía unos extraños canticos. Pero por alguna razón solo la Búho podía escucharlos.
¿Que estaba sucediendo?
"¿Qué es...? ¿Esa voz?"
Cap 5. Voces en forma de alma
"¿Que ocurre Insomnia? ¿Te encuentras bien?"
La búho alzó ligeramente sus alas y dio un gran salto, llegando así a la única ventana que había en la habitación. Desde ahí, podía apreciar las inmensas llanuras de Moorland y Pinta, pero, no parecía impresionada por aquello, era otra cosa lo que le llamaba la atención.
"¿No escuchas a mis hermanos? ¡Me están llamando! Tengo que ir. ¡Están vivos! ¡Me necesitan!"
Tan emocionada como confundida, la búho trató de alzar el vuelo, pero aún estaba demasiado débil.
Paula pudo ver la preocupación en los ojos de la ave, y algo, dentro de ella, le dijo que tenía que ayudarla. Acto seguido, agarró su chaqueta y gorro, dejando que Insomnia se posase en su hombro.
"Te ayudaré a llegar hasta allí."
Ambas se dirigieron nuevamente al establo para recoger a Presidente; con él llegarían antes. No perdieron el tiempo y a los pocos minutos, ambas estaban encima del corcel galopando en dirección de la llamada.
"¡Hermana...! ¡Ayúdanos...! ¡Estamos aquí...!"
"¡Es allí! ¡En esa cueva!"
En cuanto llegaron, Presidente frenó en seco. Paula había oído miles de leyendas y fabulas sobre aquella caverna, pero sabía a ciencia cierta que nadie había entrado allí en años, por respeto a uno de los gobernadores mas importantes de Jorvik, que fue enterrado allí en su dia.
Era la tumba de Jon Jarl.
"¿Estás segura? Esto es una tumba"
"¡Si! ¡Están aquí adentro, vivos! ¡Todos ellos!"
Aquello no tenía ni pies ni cabeza. ¿Acaso esas sombras no habían matado a los de su especie? ¿Cómo habían llegado hasta este mundo entonces? Preocupada, y mas aun confundida, Paula se bajó del caballo, llevando a la búho en sus brazos.
"¿Y si...? ¿Esta tumba es en realidad un portal?"
"¿Se habrían...? ¿Reencarnado?"
Cap 6. La reencarnación de lo perdido
Ambas cruzaron la entrada de la cueva, sintiendo aún aquella fría brisa. La llamada de los Búhos retumbaba por toda la cueva.
"¡Sálvanos! ¡Estamos aquí! ¡Hermana, ayúdanos!"
"No sé cómo, pero, ahora también puedo escucharlos. Las voces vienen de lo mas profundo de la caverna."
"Eso es por qué compartes mi sangre, y yo la tuya. Es por eso que puedes comunicarte conmigo, y ahora, también puedes comunicarte con ellos."
Las voces seguían retumbando en la cabeza de Insomnia y Paula, que estaban bajando por una estrecha rampa, hasta llegar a la zona más profunda de la cueva. La tumba.
"¿Dónde están? No los veo por ningún lado."
"Parece que las voces vienen de este pozo, pero no veo nada dentro."
En cuanto las dos se asomaron lentamente al pozo, algo brilló en lo mas profundo de este, y un espíritu surgió.
"¿Que...? ¿Que es esto...? Insomnia..?" Dijo asustada la muchacha
"Debe de ser el alma atrapada de la tumba." Confirmó la búho
Una angelical voz empieza a retumbar por todo el lugar, del pozo donde estaba situado el espíritu de Jarl salía una fría brisa en forma de canto que decía repetidamente
"Os entregaré las almas de los perdidos. Juntar vuestras sangres, formando así una sola, devolver la vida a un ser sin alma, creando un nuevo destino, ave y humano. Que la profecía llegue en vano, destruir las sombras que absorben y destruyen la luz de los seres inocentes. Vosotros podéis terminar esto, Silver Owls."
De lo que era un rayo de luz, ahora en forma de alma, salen del pozo un montón de búhos y humanos.
Al compartir sangre, las almas de los búhos vencidos en batalla habían vuelto a la vida con sus anteriores cuerpos, pero algunos de ellos en forma humana por la combinación de sangre que tuvieron Paula y Insomnia el día que se conocieron.
La voz del espíritu de la tumba terminó explicando a detalle todo lo sucedido a los nuevos renacidos.
"Una guerra entre seres de luz y criaturas llenas de destrucción. El comienzo de un nuevo futuro"
"Estaba por suceder."
CONTINUARÁ